miércoles, 4 de junio de 2014

Las técnicas de reconocimiento facial: el arma de la policía para identificar a autores de actos vandálicos como los de Can Vies

El desalojo del edificio ocupado Can Vies, en Barcelona, ha generado esta semana una oleada de altercados que, después de cuatro noches consecutivas de incidentes, se ha saldado con con más de 40 detenidos. Sin embargo, no todos los causantes de los disturbios han sido arrestados por los Mossos d’Esquadra y, por este motivo, la policía científica trabajará en los próximos días para identificar a los agitadores que provocaron la quema de contenedores, los ataques a entidades bancarias y otros actos vandálicos utilizando técnicas forenses de reconocimiento facial, como las que desarrolla el gabinete pericial Peritos Judiciales GP-Grup con expertos de primer nivel.
El sistema de reconocimiento facial es una aplicación dirigida por ordenador que identifica automáticamente a una persona en una imagen digital. Esto es posible mediante un análisis de las características faciales del sujeto extraídas de la imagen o de un fotograma clave de una fuente de vídeo, y comparándolas con una base de datos, es decir, el programa de reconocimiento facial aplica una especie de rejilla al rostro que mide las distancias entre los ojos, la nariz, la boca, etc. y busca coincidencias con las imágenes de las que ya se dispone. Se trata pues, de algo muy parecido a lo que solemos ver en las películas o series de televisión, cuando se coteja la imagen de un sospechoso con las fichas de una base de datos para saber si éste está fichado por la policía y, poder así identificarlo.

Precisamente, pese a que pueda parecer sólo un recurso cinematográfico sin aplicación real, actualmente la situación es justo la contraria. El reconocimiento facial se ha convertido en los últimos años en un área de investigación activa que abarca diversas disciplinas, como el procesado de imágenes, la visión por ordenador, el reconocimiento de patrones y las redes neuronales. De hecho, esta disciplina se aborda desde una doble vertiente, involucrando tanto a investigadores del área informática como a neurocientíficos y psicólogos.

Además, incluye también el reconocimiento de objetos. En este caso, la cara es un objeto tridimensional sujeto a variaciones de iluminación, posición, etc. que se compara con su proyección en 2 o 3 dimensiones dependiendo de la técnica utilizada.

En el caso de Can Vies, no obstante, la identificación puede resulta más compleja, ya que muchos de los autores de los atentados realizaron los actos vandálicos con la cara cubierta, usando pañuelos o bufandas para cubrir total o parcialmente sus rostros.